¿Y las redes sociales?
La sociedad de la comunicación seguirá siendo un modelo de convivencia, el diálogo de la vida compartida. Las relaciones y sus formatos de poder, sin duda, han cambiado, en su estructura, discurso, formato, están en constante evolución. Las elecciones 2018 nos dicen mucho acerca de este fenómeno. Las redes sociales hicieron cerillismo electoral, incendiaron la pradera de las voluntades políticas, sus discursos fueron encuestas, diatriba, intolerancia e incitación a la violencia. Se escenificó en la manipulación previa de los sentimientos, un guion cinematográfico perfecto para que el cuerpo electoral eligiera con libertad, con la autonomía que la democracia concede. El escenario fue legal y además legítimo, más de 30 millones de razones políticas así lo determinaron.
Las relaciones entre las personas van cambiando de conformidad al tipo de red y sus alcances tecnológicos, desde palabras tecleadas, imágenes, sonidos, fotografías, mini producciones video gráficas, memes… Eso pasó en las campañas electorales, se confió en las redes y se disminuyeron drásticamente las visitas, intercambios interpersonales, descuidaron el discurso político por vía de redes sociales. Las campañas no buscaron simpatía electoral por vía de la política, mediante de interlocutores válidos, optaron por la vía congelada de mensajes de voz, de texto SMS, chat, email…, la comunicación dejó de compartir significados para hacer una comunicación fría, de imágenes, audios, escritura…, “vota por Jacinto Nalgapinta para…”, así, fueron un despropósito político, una contradicción comunicativa, un desaseo discursivo.
¿Qué aportaron las redes sociales REALES a la comunicación política?, después del inobjetable triunfo de MORENA las redes guardan un silencio difícil de explicar. Será una transformación que impedirá en el futuro inmediato cultivar las relaciones humanas sin robots inteligentes como intermediarios; ya nada importa el discurso corporal, ¿desaparecerá el teatro, los sueños, las utopías, del mundo de la vida?, se cancelará la capacidad de sentir las combinaciones de poder y saber en el contacto humano. Tengo para mí que nada puede suplantar el gran conversatorio sensible, a pesar que las pantallas sean la nueva realidad que aniquila horizonte, paisaje, el mundo concreto, empero éste no desaparece, sino que hace una nueva concepción del mundo, del tiempo y el espacio. Pero el humano no desaparece, se hace persona y la persona se ciudadaniza, y la ciudadanía adquiere derechos y obligaciones, en una nuez: vive en sociedad, hace política.
Ahora vale un llamado a las redes que nos angustiaron con imperativos violentos, para que se sumen al trabajo de suturar las reconciliación social, animar al cambio desde la NO VIOLENCIA, se requieren las complejas redes sociales de las campañas para hacer el cambio de actitud en una nueva mentalidad como base de nuevas políticas públicas. ¿Por qué las redes que soliviantaron la violencia y el descredito han enmudecido?
Las redes sociales cumplen una actividad especial y esencial en la sociedad de hoy, no podemos dejar que las subsuman en un crisol destructivo, la política es la paz discutida con amplitud y apasionamiento, con energía y argumentos, con respeto y cordialidad. Las redes son de gran utilidad nos dan la perspectiva de un nuevo mundo en el que el orden sucesivo y el orden simultáneo están en lo inmediato, se configuran a la velocidad de la luz. Es preciso que jamás podrán suplantar la mejor red social jamás inventada: la vida compartida. Sin duda, las redes sociales nos acercan con los que están lejos, pero sin el ejercicio de la política nos aleja de los que están cerca. ¡Cuidado!
La razón es simple, las redes sociales que saben su menester de compartir significados pueden servir para crear nuevos modos de convivencia en comunidades donde sus integrantes comparten culturas e información de interés común.
Las redes falsas no producen buena convivencia, han sido la miel que atrae a muchos depredadores que buscan únicamente aprovecharse de usuarios incautos o inocentes que publican información sensible que es aprovechada por los delincuentes informáticos en acción de malhechores políticos.
Las redes sociales en el futuro será preciso y político que además de ser influencias de la moda, de alertar los alcoholímetros, sean ruta de una nueva pedagogía. Las redes son la cartografía de una sentencia: estar siempre comunicados. Transitar en una pedagogía de la velocidad de la luz para atender el valor agregado de ser más visual que textual. Una pedagogía que posibilite revisar el comportamiento de los internautas. El tema es estar conectados desde todas las tecnologías y los nichos. Las redes sociales son las nuevas plazas para las arengas políticas, el nuevo espacio público. La redes avanzan en la creatividad y la innovación, en el horizonte ya vislumbramos la web 3.0, la forma de permanecer siempre comunicados. No podrán avanzar sin valorar los gustos.
Por: Ignacio Ruelas Olvera